Para este efecto hemos recurrido al CGI, una técnica que no mancha y es reutilizable.
La explosión de sangre como efecto visual es muy recurrente en el mundo del cine.
Por ejemplo, se utiliza en disparos para películas de acción o del oeste. También podemos verlas en cortes con espadas o machetes.
El cliente
En este caso, recibimos el encargo por parte del cineasta y escritor valenciano Alberto Rey. Es conocido por su trilogía Steamfield, pero este artículo se centrará en el trabajo que hicimos para su cortometraje “La fábula de la Quarantamaula”.
El proyecto
Concretamente, Alberto nos pidió que este efecto surgiera de la boca de un lobo dibujado por uno de los personajes del corto. Aunque no teníamos muchas referencias de este tipo de explosión, se realizaron varias pruebas hasta obtener el resultado que el cliente buscaba desde el principio.
La técnica
El efecto de sangre se generó con un programa de modelado 3D y los fotogramas se renderizaron en formato PNG. Así, obtuvimos poco más de cien imágenes. Posteriormente, la secuencia de imágenes obtenida con estos renders se montó sobre el fragmento de vídeo original con la ayuda de un segundo programa de edición de vídeo.
Para la realización de fluidos se suelen utilizar programas como Houdini, Realflow, Blender, Maya o 3D Max, entre otros. En cambio, para la edición de vídeo se utilizan programas como Avid, Premiere, After Effects o Davinci.
Resultado
En el siguiente vídeo se puede ver cómo quedó el resultado final.
Para este corto, no solo utilizamos la explosión de sangre como efecto visual. Más adelante, mostraremos otro efecto que realizamos para este corto. A ver si adivinas cuál es.
Mientras tanto, te recomendamos que lo veas desde este enlace.
Y, si necesitas este tipo de recursos para tu proyecto, puedes contactar con nosotros desde aquí.